¿De qué se trata meditar?

meditar es un estado de conciencia mental y una forma activa de entrenar nuestro cerebro. 

Es una técnica que se practica hace más de 3000 años dado que nos permite lograr una profunda paz que ocurre cuando la mente está en calma y en silencio, aunque completamente alerta.

Es un primer paso hacia ampliar nuestra conciencia y elevar nuestra presencia mental y es reconocida como una de las formas más efectivas de reducción de stress.

¿Para qué sirve?

  • reduce la ansiedad

Hay estudios que demuestran que meditar reduce la actividad de nuestra Red Neuronal por Defecto-RND, responsable del "vagabundeo mental" (o "mind-wandering" en inglés) que está estrictamente relacionado con la depresión. Al aquietar esta RND, la meditación reduce la ansiedad y facilita la presencia mental. 

  • Rejuvenece nuestro ser y nos hace sentir bien. 

Meditar puede mejorar en un 65% nuestra sensación de bienestar. Estudios demuestran que el tamaño del efecto que tiene meditar es de 0.3. Parece poco, pero es el mismo que tienen los antidepresivos!

Está comprobado que aquellas personas que meditan preservan mejor el volumen de la materia gris del cerebro, reduciendo el envejecimiento. 

  • aumenta el enfoque

Meditar mejora nuestra concentración y atención. Está comprobado que pueden mejorar nuestras habilidades congnitivas con tan solo tres semanas de meditación!

¿Por qué creemos en la meditación?

Nuestra mente se dispersa muy fácilmente y no siempre hacia los lugares más felices.

La meditación es un cable a tierra. Nos permite calmar la mente, relajar el cuerpo y estar en eje. En Komorebi la aplicamos a todos nuestros servicios porque nos conecta con todo lo lindo que tenemos en nuestra vida a través de nuestra respiración, ayudándonos a vivir el presente y sentirnos en paz.

 

 
En Komorebi aprendí a respirar, concentrarme y meditar. Hoy aplico esas técnicas todos los días.

Desde que trabajé con Graciela, mantengo mis niveles de presión cardíaca estables y ya no necesito aumentar mi medicación como estaba previsto.
— ANTONIA GRAZIANI